08Februar
2018

El páramo venezolano en Mérida

Nach unserer etwas chaotischen Busfahrt kamen wir in der bekannten Touristen-Stadt Mérida in den Anden an. Unsere Gastgeber waren diesmal ein homosexuelles Pärchen und der Aufenthalt war wirklich verdammt witzig mit den beiden smile. Die Stadt hat ein einladendes Zentrum, doch die eigentlich Hauptattraktionen liegen um die Stadt herum in den Nationalparks. Unser Ziel war eine Wanderung zu realisieren bzw. ein paar Tage in der Natur zu verbringen. Die Gestaltung war allerdings nicht ganz so leicht wie gedacht. Wären wir aber venezolanische Staatsbürger, hätten wir es etwas bequemer gehabt.

Estación del TeleféricoDie Preise =/

Seit Oktober 2016 ist dort nämlich eine der längsten und höchsten Seilbahnen der Welt in Betrieb gegangen. Erbaut wurde sie von der österreichischen Firma Doppelmayr und die 106 Millionen wurden noch nicht vollständig vom Staat beglichen (Artikel zum Lesen: https://www.tagesanzeiger.ch/sonntagszeitung/dny/Venezuela-schuldet-Garaventa-13-Millionen-fuer-RekordSeilbahn/story/18147750). Alle Venezolaner, die wir während unserer Reise getroffen haben, meinten wir müssen unbedingt damit zum Pico Espejo (4765 m) hinauffahren. Ja, das hätten wir auch sehr gerne gemacht, doch wie immer machte uns Maduro einen Strich durch die Rechnung. Die Hin- und Rückfahrt mit der Bahn kostet für einen Venezolaner z.Z. 20.000 Bs. (0.08$) für einen Ausländer 50$!!! Herzlichen Glückwunsch, das war die extremste Diskriminierung, die ich hier auf Kontinenten erlebt habe. Für diese 50$ hätten 582 Venezolaner die Seilbahn benutzen können yell. Nachdem wir weder das Geld noch die Lust hatten sowas zu unterstützen, haben wir uns also einen anderen Weg gesucht, um wenigsten einen Blick auf den höchsten Berg von Venezuela, den “Pico Bolívar”, mit seinen 4978 m, zu werfen.

Los NevadosDas DorfDorflebenEn la mañanaEl páramo

Wir sind mit einem Jeep ca. 3 ½ Stunden in das Dörfchen Los Nevados gefahren, haben uns dort ein Zimmer genommen und sind am nächsten Morgen zeitig zu unserer großen Wanderung aufgebrochen. Diese führte uns durch den berühmten “Páramo”, ein typisch südamerikanisches Ökosystem. Die Vegetation ist eher niedrig und vor allem geprägt durch eine Pflanze namens “Frailejón”, die sich an dieses Klima optimal angepasst hat. Das Ziel unserer Wanderung war der Pass “Alto de la Cruz” auf 4200 m Höhe. Von diesem Punkt aus sah man die dritte Mittelstation der Seilbahn, die Endstation auf dem Pico Espejo und den Pico Bolívar laughing. Wir brauchten 5 Stunden dafür und oben angekommen, gab es eine verdiente Brotzeit.

FrailejónPico BolívarBajando en mulas

Auf dem Rückweg überholten uns ein paar Männer mit ihren Mulas, die wir spontan fragten ob sie uns nicht für einen Doller ein Stück mitnehmen wollen. Die waren unserem Angebot nicht abgeneigt und auf dem Rücken der Tiere ging es steil abwärts. Am Anfang etwas holprig, danach sehr witzig und am Ende tat einem alles weh. Immerhin sparten wir uns so einen Teil des Weges und am späten Nachmittag waren wir wieder zurück im Dorf, wo wir uns ausgeruht haben. Am darauffolgenden Tag ging es wieder mit dem Jeep nach Mérida vorbei an einer wunderschönen Kulisse der Anden.

Mérida

Von einem weiteren Tagesausflug möchte ich nur kurz erzählen, weil ich mich sonst wieder aufregen muss. Einer der schlimmsten Ausflüge meines Lebens. Daraus lernt man, man organisiert es doch lieber selbst. Wir besuchten eine Steinkirche, einen Pass, den Simón Bolívar mit seiner Kavallerie überquerte, eine Lagune und heiße Thermalquellen.

Laguna de MucubajíAguas termales

El páramo venezolano en Mérida

Después de nuestro viaje caótico con el bus llegamos a la ciudad turística de los Andes, Mérida. Nuestros anfitriones fueron una pareja homosexual y nuestra estadía fue muy chistosa smile. El centro de la ciudad te invita a pasear pero las atracciones más lindas están en sus alrededores. Nuestro destino fue una caminata en la naturaleza. La realización hubiera sido más fácil si fuéramos venezolanas.

Desde octubre 2016 se puede usar uno de los teleféricos más largos y más altos del mundo en Mérida. Construido de una empresa austriaca-suiza que todavía no han visto su plata del gobierno. Todo los venezolanos que hemos conocido durante nuestro viaje nos recomendaron subir con el teleférico hacía el Pico Espejo a 4765 m. Pues, nos hubiera gusto subir pero lamentablemente imposible con nuestro bolsillo. El billete de ida y vuelta costaba para venezolanos de momento 20.000 Bs. (0,08$) y para extranjeros 50$!!! Muchas Gracias, fue la discriminación más extrema que viví acá en Sudamérica. Por 50$ hubieran podido subir exactamente 582 venezolanos yell. Ni tuvimos esa plata y ni quisimos suportar algo así. Por eso nos buscamos otra posibilidad para tener una vista a la montaña más alto de Venezuela, el “Pico Bolívar” con sus 4978 m de altura.

Fuimos en un 4x4 tres horas y media hacia un pueblo, llamado Los Nevados. Allá dormimos una noche y temprano empezamos nuestra caminata que nos llevaba al páramo, un sistema ecológico típico por esa región. La vegetación es baja y caracterizada  por la planta famosa con el nombre “frailejón”. Se ve en todos los lados y se adaptó muy bien al clima de los Andes. Nuestro destino fue el paso “Alto de la Cruz” a 4200 m. Desde ese punto vimos la tercera estación y la última estación del teleférico al Pico Espejo. Además el Pico Bolívar. Estuvimos felices laughing. Necesitamos 5 horas para subir y almorzamos con una vista hermosa.

En la vuelta nos adelantaron unos hombres con sus mulas. Preguntamos espontaneo si nos quieren llevar un rato por un dólar. Les gustó nuestra oferta y a la espalda de los animales bajamos. La experiencia fue al principio un poco rara, después divertida y al final muy dolorosa. Ahorramos una parte del camino y el resto caminamos. En el pueblo nos relajamos y al próximo día volvimos en el 4x4 a Mérida con una vista linda hacia los montes de la cordillera.

De la otra excursión que hicimos no quiero contar mucho, porque no quiero estar de nuevo enfadada. Fue uno de los peores que hice en toda mi vida. Vale más organizar todo por sí mismo. Visitamos una iglesia de piedras, un paso que tomo Simón Bolívar con su caballería, una laguna y aguas termales calientes.